Tal vez arrastremos dificultosamente todo nuestro bagaje de elementos.
Pero como al crecer sufrimos y la vida no va agrietando el alma sin piedad, sostengo también que es posible. Aunque podemos crecer en forma intermitente, casi sin percibirla mientras nos desplazamos con los vendavales ajenos o movidos por nuestras cálidas y endebles brisas interiores.
Quisiera cruzarme en el camino de un mistral y llegar al sol. Porque cuando se llega a la fuente, morir es casi un privilegio.
Laura Cipriano
De”
La Ciencia Jurídica
y sus dos Maridos”, Luis Alberto Warat. pag. 55.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario