El pensamiento complejo se puede definir como una propuesta que hace Edgar Morin para encontrar una nueva forma de estudiar, analizar y entender como funciona el mundo y toda la diversidad de fenómenos que se presentan en este, reconociendo la infinita interacción y relaciones que existe entre cada una de las ciencias y disciplinas que se encargan de explicar la realidad.
Ahora bien, esta propuesta, que el autor llega a llamar “Método”, consiste principalmente en abrirse el pensamiento a la transdiciplinariedad, es decir, en “pensar complejamente”, entendiendo que ningún fenómeno o punto de estudio se puede ver desde solo un punto de vista; sino que para realmente acercarse a entender el mundo es necesario verlo y estudiarlo desde todas las perspectivas posibles. “entendemos que el estudio de cualquier aspecto de la experiencia humana ha de ser, por necesidad, multifacético”.
De esta forma se deja atrás las antiguas metodologías de estudio que intentan reducir las cosas a lo mas simple y aislado, ignorando la infinita relación entre todo cuanto conforma la realidad. “la ambición del pensamiento complejo es rendir cuenta de las articulaciones entre dominios disciplinarios quebrados por el pensamiento disgregador”.
Con esto, lo que se busca finalmente es una organización del conocimiento y de las formas de ver la realidad, donde nada se pase por alto, intentando así darle un nuevo orden y estructura al pensamiento; pero estando dispuesto a cuestionarlo nuevamente en un proceso sin fin de construcción y destrucción, en el cual todo cuanto se va cuestionando y conociendo nos permita nuevas herramientas para seguir encontrando mas problemas que ayuden así a estructurar cada vez mas el conocimiento.
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